He estado en Barcelona y Bilbao en fechas recientes, dos ciudades con fama de tener un alto nivel de vida y por lo tanto unos precios más caros de lo normal. Sin embargo me he llevado la desagradable sorpresa de ver los precios hasta un 20% más baratos que en supermercados de Gran Canaria.
Lo más sangrante del asunto es que suceden dos cosas por las cuales no debería pasar esto la primera las ayudas de la Unión Europea a los alimentos básicos y por otra parte el diferencial fiscal.
Las ayudas del REA se aplican a los alimentos para compensar los gastos de transporte, no hace falta ser un lumbreras para ver que estas ayudas no se están aplicando y que están engrosando la cuenta de resultados de las empresas importadoras sin repercutir beneficios para el consumidor.
La diferencia fiscal es otra cosa que no vemos tampoco, es fácil de ver en empresas con implantación nacional, los precios aplicados en España y Canarias son exactamente iguales. Si tenemos en cuenta que en un sitio de aplica un 12% de impuestos y en otra un 4.5% otra vez un montón de dinero que se llevan sin repercutir en los consumidores y que de nuevo forma parte de la cuenta de resultado de estas empresas sin escrúpulos.
Y que no me digan que es el transporte, ese cuento no me lo trago. Ya sabemos lo que hacen las compañias aéras cada vez que se suben las subvenciones al transporte, subirnos los billetes a los canarios en la misma proporción.
Lo más sangrante del asunto es que suceden dos cosas por las cuales no debería pasar esto la primera las ayudas de la Unión Europea a los alimentos básicos y por otra parte el diferencial fiscal.
Las ayudas del REA se aplican a los alimentos para compensar los gastos de transporte, no hace falta ser un lumbreras para ver que estas ayudas no se están aplicando y que están engrosando la cuenta de resultados de las empresas importadoras sin repercutir beneficios para el consumidor.
La diferencia fiscal es otra cosa que no vemos tampoco, es fácil de ver en empresas con implantación nacional, los precios aplicados en España y Canarias son exactamente iguales. Si tenemos en cuenta que en un sitio de aplica un 12% de impuestos y en otra un 4.5% otra vez un montón de dinero que se llevan sin repercutir en los consumidores y que de nuevo forma parte de la cuenta de resultado de estas empresas sin escrúpulos.
Y que no me digan que es el transporte, ese cuento no me lo trago. Ya sabemos lo que hacen las compañias aéras cada vez que se suben las subvenciones al transporte, subirnos los billetes a los canarios en la misma proporción.
Comentarios